(N. en Constitución, 1896). Ya se divisa en él un artista, a pesar de cierta desproporcionalidad que se nota en el uso de sus elementos poéticos.
A través de tonalidades aún deficientes suelen encontrarse rasgos tan valientes y originales que aquellas son preferibles a una forma que a fuerza de paciencia y estudio ha llegado a la perfección gramatical, pero que en el fondo ya no puede dar más de sí. ¿Qué gana la Poesía con esas tiradas de versos hechos en el yunque de la Retórica, si leerlos es como pretender libar en una copa vacía?.
Ibar será, a lo que parece, un pintor de nuestras costumbres, vigoroso y colorista, sin que esto signifique que no sepa desdoblar repliegues de su mundo intimo, de su corazón, de su propio soñar y existir.
Mi cerebro es negro rescoldo. Quiero un canto de cálidos timbres que retumbe en el fondo de mi alma como golpes de hacha en el tronco de un boldo! Tengo sed de algo ardiente, de un pedazo de sol! Quiero ver una lucha de astros en un cielo sin Dios!
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Y entreabro el balcón; afuera la noche silente. Solo en las tejas del frente, parten el cielo dormido en dos mitades eternas, las líneas que tiran las verdes linterna de un gato bandido! ……………………………………
ASÍ
Mi corazón es sombra muerta: todo negro y callado desde entonces. Solo al verte pasar, dos lucecitas, -recuerdo de dos besos de una noche- brillan en él :muy débiles, lo mismo que los ojos abiertos de un cadáver donde brilla la luna cuando pasa…
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ENERO NUBLADO
(En la falda de un cerro)
Bajo la concha de plumas de un cielo blando y nublado, duerme el pueblo, arrebujado en la humedad de las brumas.
Mella el mar sin horizonte sus olas que se desgranan, en la arena en que se aplanan los pies del último monte.
Y, hundidas sus esmeraldas en las cenizas del cielo, parece el río de hielo un pez echado de espaldas.
Los cerros al otro lado -tendidos montones de humo- cercan el pueblo en que sumo los ojos medio cerrados.
Cantos de gallos muy lejos... Humo que vive un instante... Llorando en la bruma, errante el alma de los reflejos.
Grita un lejano heladero con su corneta de «cacho»... Pasa cantando un borracho, y un jote arriba hace un cero. ………………………………………